Federico García Lorca habla a los obreros catalanes.
Antonio Otero Seco. (Entrevista publicada en L´Hora de Palma de Mallorca el 27 de septiembre de 1935).
“El artista como observador de la vida no puede quedar insensible a la cuestión social, No es una cosa que diga yo ahora por que sí. No. Hablo por mí y por muchos amigos míos a quienes les ha pasado lo mismo. Mire, cuando fui a Norteamérica, ilusionado por aquel mundo nuevo, tan moderno, tan codiciado por todos, sentí una sensación de desesperanza, Por las calle vi un gran número de hombres que vendían manzanas. Había muchos jóvenes. ´Cómpreme una manzana, señor`, imploraban tristemente, Era obreros sin trabajo, trabajadores ociosos que salían a la calle en busca de una limosna (…). Yo me horroricé cuando me dijeron que sólo en los Estados Unidos había doce millones de parados. Ya ven que sólo con observar el alcance de todo el drama social de hoy, ante el cual nadie que sienta el más pequeño sentimiento de solidaridad humana puede estar insensible”.