Catalina de la Cotera París Bárcena fue una actriz española que, junto con Margarita Xirgu y María Guerrero, integró el grupo de intérpretes más importante de la historia del teatro español de la primera mitad del siglo XX. Tras la Guerra Civil se exilió en diversos países y no regresó a Madrid hasta 1947.
Nació en Cuba, en 1890 y se inició en los escenarios en la Compañía de María Guerrero. Su relación profesional con Gregorio Martínez Sierra -dramaturgo y director escénico con quien vivió una larga relación extramarital- la convirtió en la actriz más importante del momento, renovó la escena española y conquistó los escenarios de Europa y de Estados Unidos. Protagonizó siete películas en Hollywood, todas en español.
La actriz fue una de los responsables de que Lorca estrenara su primera obra dramática, El maleficio de la mariposa, que se representó sólo cuatro días y fue un fracaso, tanto que jamás se repondría en vida del poeta.
La compañía de Martínez Sierra, de la que ella era la primera actriz, introdujo en España a Henrik Ibsen y Bernard Shaw e incorporó a músicos como Turina y Falla. Pero la gran renovación del Teatro de Arte del Eslava radicó en su innovador tratamiento escenográfico.
Ella y Martínez Sierra fueron los responsables de que Lorca estrenara su primera obra dramática, El maleficio de la mariposa. La obra, que se representó sólo cuatro días, entre el 22 y el 25 de marzo de 1920, fue un fracaso, tanto que jamás se repondría en vida del poeta. Lorca la concibió para teatro de marionetas pero Martínez Sierra lo convenció para cambiarlo por un reparto convencional de actores. Se trata de una fábula sobre una mariposa que cae en un campo de curianas. Allí se enamora de Curianito, el nene, personaje imaginativo y medio poeta. Lorca, que intuía el fracaso, convocó a varios de los amigos de El Rinconcillo que vivían en Madrid para formar la claque. Santiago Ontañón recuerda así el estreno: “Todos se portaron muy…, pero el estreno fue desastroso. Fue uno de esos estrenos madrileños en que se venían abajo los techos del pataleo […]. De forma que el maleficio anunciado en el título se cumplió al pie de la letra y hasta sus últimas consecuencias. Federico me lo contaba siempre muerto de risa y hasta creo que exageraba las proporciones”.
Cuando estalló la Guerra Civil, Bárcena huyó de España a bordo de un barco gracias a que una hermana suya estaba casada con un capitán de corbeta. La familia desembarcó en Orán y desde allí se trasladó a Tetuán. Bárcena no permaneció en África mucho tiempo y desde allí recorrió Marsella, París y Buenos Aires hasta que en 1947 decidió regresar a Madrid donde, tras formar la Compañía Cómico-Dramática Española, estrena en 1948 en el Teatro de la Comedia Pigmalion de Georges Bernard Shaw.
Lorca le dedicó un poema titulado A Catalina Bárcena: “Tu voz es sombra de sueño. / Tus palabras / son, en el aire dormido, / pétalos de rosas blancas. / Tienen tus ojos la niebla / de las mañanas antiguas. / ¡Dulces ojos soñolientos, / preñados de lejanías!”.
Murió el 3 de agosto de 1978 con noventa años.